La Secretaría de Educación Médica (SEM) de la Facultad de Medicina de la UNAM aplicó el Examen Profesional correspondiente al periodo 2023-2 a un total de 150 estudiantes que concluyeron la Licenciatura de Médico Cirujano, de los cuales 23 son alumnos de la Facultad de Medicina y 127 de instituciones del Sistema Incorporado a la Máxima Casa de Estudios.

El 6 y 7 de junio se realizó la fase teórica de la prueba en el Centro de Evaluación Automatizada, ubicado en el 4º piso de la Torre UNAM-Tlatelolco. En dicha fase, los estudiantes respondieron 330 preguntas organizadas en un formato de reactivos de opción múltiple de tres opciones de respuesta con el uso del Sistema Integral de Aplicación de Exámenes (SIAEX).

Por otro lado, el 17 y 18 de junio presentaron en el Centro de Evaluación y Certificación de Competencias en Salud la fase práctica a través del Examen Clínico Objetivo Estructurado (ECOE), conformado por seis estaciones clínicas en las que el sustentante “atiende” a un paciente estandarizado que representa alguna de las patologías más frecuentes de la práctica médica en México, y en cada estación hay un evaluador, quien califica el desempeño de la o el alumno. Al ECOE se le considera el estándar de oro en la evaluación de las competencias clínicas y, por ello, se aplica en la Facultad de Medicina

“Para conocer el objetivo del Examen Profesional nos basamos en dos documentos: el Reglamento General de Exámenes plantea en su artículo 18 que el propósito de esta evaluación es que se valoren en conjunto los conocimientos generales de los sustentantes, su aplicación y ver si poseen criterio profesional; y de acuerdo al Plan de Estudios 2010 de la Licenciatura de Médico Cirujano, la finalidad es verificar que los estudiantes desarrollaron las ocho competencias necesarias a lo largo de su carrera”, indicó el doctor Armando Ortiz Montalvo, Titular de la SEM.

Asimismo, explicó que las competencias a evaluar, son: pensamiento crítico, juicio clínico, toma de decisiones y manejo de información; comunicación efectiva; conocimiento y aplicación de las ciencias biomédicas, sociomédicas y clínicas en el ejercicio de la Medicina; habilidades clínicas de diagnóstico, pronóstico, tratamiento y rehabilitación; profesionalismo, aspectos éticos y responsabilidades legales; y salud poblacional y sistemas de salud, promoción de la salud y prevención de la enfermedad.

El doctor Ortiz Montalvo externó su felicidad de que el 95 por ciento de los sustentantes acreditaron el Examen Profesional, y el siguiente paso será que hagan su Servicio Social en agosto o pueden esperar al mes de enero para iniciarlo; sin embargo, los estudiantes que no lograron acreditar tienen la opción de tomar el Programa de Recuperación Académica y Titulación que imparte la Secretaría de Enseñanza Clínica, Internado Médico y Servicio Social de la Facultad de Medicina, para volver a presentar la prueba en enero.

También, mencionó que a pesar de que fueron pocos sustentantes en este periodo del examen, nada hubiera sido posible sin el apoyo del personal de la Torre UNAM-Tlatelolco, la Secretaría General (SIAEX) y de la Secretaría de Servicios Escolares de la Facultad.

Fotografías cortesía de la SEM, FM, UNAM

“Esta es una prueba para la que no se estudia de un día para otro, desde que los estudiantes llegan a la Facultad empiezan a prepararse para presentar su Examen Profesional porque van desarrollando las competencias a lo largo de la carrera. Para que puedan acreditar con el mejor resultado, les aconsejaría a las próximas generaciones que hagan las Evaluaciones de Avance Académico que se realizan al salir de segundo, tercero y cuarto año porque dan cuenta de si están consiguiendo los perfiles intermedios 1, 2.1 y 2.2, y así pueden identificar lo que les falla y trabajar en eso”, puntualizó el doctor Ortiz Montalvo.

Karen Hernández