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“Durante este tiempo me he dado cuenta de que los conocimientos que adquirí como estudiante tienen una aplicación diferente en el mundo laboral. Esta aventura ha sido un constante proceso de reaprendizaje en aspectos asistenciales, administrativos e incluso de investigación”, expresó Ángela Fernanda Montes Don Diego, pasante de la Licenciatura en Fisioterapia (LF) de la Facultad de Medicina de la UNAM, quien realiza su Servicio Social en la Minera Mexicana “La Ciénega” del estado de Durango por parte de las Brigadas de salud y Desarrollo comunitario de Fundación UNAM.

“La sede en la que estoy se encuentra en medio de la Sierra Madre Occidental en la comunidad de Ciénega de Nuestra Señora, son aproximadamente siete horas de camino desde la ciudad más cercana y es por eso que en la clínica, además de trabajadoras y trabajadores mineros, atendemos a la población en general”, explicó la pasante, y añadió que aunque es un espacio de primer nivel de atención, cuenta con urgencias, sala de partos y consultorios para las diferentes áreas de la salud como Medicina, Enfermería, Odontología y Fisioterapia.

Las principales actividades que realiza como pasante de la LF son diagnósticos funcionales y consultas de seguimiento, además de impartir pláticas y orientación en las campañas de salud que organizan con las personas de la comunidad. “El área de trabajo que nos otorga la empresa cuenta con todos los recursos necesarios para brindar atención de calidad, como equipo de electroterapia, camilla, y material de ejercicio y fortalecimiento”, describió entusiasta.

Para Fernanda, vivir en un lugar alejado de las presiones de la ciudad ha tenido un impacto enorme en su estilo de vida y la manera en que ocupa su tiempo, “en lo personal estaba acostumbrada a tener acceso a todo, como servicios y actividades sociales, por lo que al principio me costó trabajo acoplarme, sin embargo, esta situación me motivó profundamente a emprender nuevos proyectos con la comunidad”, comentó orgullosa.

“Actualmente estoy trabajando en un proyecto social con adultos mayores, evalúo su estado físico para integrarlos a grupos de ejercicio multicomponente y beneficiar su salud y calidad de vida”, compartió la pasante, y afirmó que durante este tiempo ha tenido la oportunidad de implementar todo lo que aprendió en su profundización de Fisioterapia Geriátrica. Además, menciona que esta experiencia ha despertado su interés por la investigación en esta área, la cual planea explorar en el futuro.

A su vez, refirió que los principales desafíos que ha enfrentado en Durango han sido la diferencia de usos y costumbres de la zona, el distanciamiento social y no ver a su familia como solía hacerlo, sin embargo, ha logrado superar cada uno de ellos enfocándose en las diversas actividades que ahora puede hacer: “Salgo a caminar por la sierra junto con otros pasantes, he conocido muchos lugares y he podido utilizar las instalaciones de gimnasio y alberca que tiene la empresa, así que también he aprovechado el enriquecimiento personal que me ha brindado el servicio”.

L. Ixchel Díaz